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Los ladrones abren las cerraduras normales en menos de un minuto, con lo que se ha disparado la demanda de cerraduras de seguridad, que se lo ponen realmente difícil a los amigos de lo extraño. Veremos ciertos tipos.Cerraduras de seguridad clásicas.Estas cerraduras de seguridad se llevan usando años en las casas. En vez de tener una sola “lengua”, cuando cerramos la puerta salen unos cuatro o cinco tubos que se meten en el marco y en la pared.En las puertas blindadas, además de estos tubos existen otros dos que se meten en la zona del marco superior y en la zona del marco inferior, en el suelo. Así la puerta es muy difícil de abrir, si bien la verdad es que las cerraduras de seguridad no son infalibles y pueden ser violentadas por la zona del bombín.Por eso, todas y cada una de las cerraduras de seguridad modernas llevan un cerco que refuerza el bombín, a fin de que no se pueda forzar, y además tienen múltiples mecanismos que impiden que los ladrones usen una llave profesora, que se puede comprar en Internet, o utilicen técnicas como la clásica ganzúa que pueden abrir cerraduras de seguridad viejas.Cerraduras de seguridad modernas

Las cerraduras de seguridad más modernas son las que se instalan por la parte interior. Lo bueno de estas cerraduras de seguridad es que no hay elemento al exterior, por lo que no pueden ser forzadas con los métodos tradiciones.Estas cerraduras de seguridad se abren con un mando a distancia, pues desde el exterior no se ve que haya una cerradura puesta en la puerta. Es un sistema nuevo que en mi opinión sirve para fortalecer la seguridad.Esto quiere decir que aparte de la cerradura interior, lo mejor es que pongamos una reforzada más tradicional. Con estos dos sistemas, será prácticamente imposible que entren a casa por la puerta.¿Te ha gustado este artículo? ¡Compartelo!Twittear

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